Rosanna Yoga

Principio del cierre

El principio del cierre de Gestalt y el Yoga

Antes de comenzar a estudiar todo lo relacionado con el yoga, estudié psicología. Desde que puedo recordar, siempre fue la profesión que quise estudiar. Me impresionaban los comportamientos humanos, las dinámicas individuales y las sociales, nuestra forma de reaccionar, nuestra manera de no reaccionar…

En psicología comienzas el camino al autoconocimiento, el camino a la ciencia del comportamiento, a la neuropsicología, a realmente comprender cómo funciona nuestro cerebro y a encontrarle (quizás) una razón al porqué actuamos como actuamos. Luego aparece en mi vida el yoga y ha sido un camino profundo y detallado donde pude comenzar a ver como la más milenaria de las ciencias, el yoga, se puede unir con una de las más modernas, la psicología.

Nuestros cerebros son extremadamente complejos y entender un poco parte de sus mecanismos puede ayudarnos a detectar y a ser más conscientes de nuestras estructuras y sistemas mentales. Es un camino al autoconocimiento.

Dentro de las ramas de la psicología moderna surge en Alemania la escuela de psicología Gestalt (que significa forma) y se construyen alrededor de ella una serie de principios que describen mecanismos de actuación de nuestro cerebro ante determinados estímulos.

La Psicología de la Gestalt compone una teoría descriptiva del comportamiento y de la percepción humana. Según ella, nuestro cerebro configura y construye información a través de la percepción que obtiene mediante los canales sensoriales y la memoria de estímulos que pasan a nuestro alrededor.

Por tanto: ¿Qué ves en estas imágenes? ¿Logras definir una forma lógica en cada una de ellas o simplemente ves líneas y manchas?

En la teoría de la Psicología Gestalt existe un principio llamado: El principio del cierre. Es un mecanismo mental que nos hace interpretar aquello que está incompleto y transformarlo en algo completo o cerrado.

El ejemplo visual claro es quizás estas imágenes que aunque no están completas, nuestra mente automáticamente busca interpretarlas y darles una forma que para ella tengan sentido.

Este principio no se limita sólo a figuras geométricas, este principio tiene un especial efecto en la formación de nuevas ideas y por supuesto, en nuestra interpretación de la realidad. En líneas generales nos incomoda ver cosas “sin terminar”, incompletas, con partes ocultas. Es por eso que ante situaciones de incertidumbre nuestra mente genera más ansiedad, inquietud, actividad mental, insomnio, hiperactividad. Es un mecanismo de nuestro cerebro de intentar buscarle un sentido, o un cierre a una situación que “visualmente” no lo tiene.

Intentamos rellenar los huecos con información más o menos relacionada y que nos permita tener un poco más de orden. Y es precisamente en este principio de cierre que aparentemente es un acto pasivo pero en realidad es un acto de construcción donde nuestra mente activamente decide construir el final que más calma le da, que se generan nuestras respuestas ante determinadas situaciones.

Este principio es el mismo que ocurre cuando por ejemplo alguien en una conversación no encuentra la palabra que quiere decir y nosotros intentamos concluir la frase. Es lo mismo que ocurre cuando escuchamos una canción y, si por algún motivo nos la quitan, automáticamente completamos el fragmento que faltó. Es el mismo principio que se utiliza en millones de películas con final abierto y nosotros le buscamos ese final alternativo.

Las formas o finales abiertos generan cierta incomodidad, por lo que tendemos a completar con la imaginación aquello que consideramos que falta.

La tendencia a "unir los puntos" ocurre tanto en la vista como en el oído: la mente completa palabras que no alcanzó a escuchar e incluso puede llegar a inventarlas con tal de darle un sentido a lo inconcluso.

En medio de esta situación (y muchas más que seguramente, simultáneamente a lo que está pasando a nivel global, cada uno de nosotros está viviendo), todos estamos intentando darle un sentido a lo que está pasando.

La percepción de la realidad es muy compleja por lo que es importante que puedas entender que tú juegas un rol fundamental en la interpretación de la realidad.

Y aquí es donde aparece el yoga, la conciencia, y el principio fundamental para poder vivir con paz, todas esas situaciones que no tienen un final aparente o se manifiestan de forma inacabada. El principio de la aceptación.

El yoga nos invita a Intentar ser más conscientes de los constructos de nuestra mente. Permítete, a través de la aceptación, aceptar las cosas que no puedes cambiar y busca, a través de la empatía y la compasión, reconocer aquellas que sí puedes.

Sé muy consciente del hecho que a veces, no todo tiene sentido, trata de ser muy consciente de cuándo tu mente está intentando “cerrar” lo que aparentemente está incompleto y sobre todo, sé muy consciente de cuándo la mente genera una “necesidad de cerrar” que es más fuerte que la misma verdad.

Incompleto no quiere decir fracaso. Inconcluso no quiere decir imperfecto. Que no sepamos el final no tiene porque significar que no podamos vivir lo que tenemos ahora.

Ojalá todos podamos, algún día, descubrir la libertad profunda que se siente dentro del constructo de la aceptación. De que todo ya es perfecto así como es incluso cuando parece no serlo.

Rosanna